Banderas borda su personaje. Recuerda mucho al Almódovar real. Tanto que en algunas escenas parece el mismo Pedro con menos años. Refleja muy bien en su persona la depresión, la desolación del personaje.
Dolor y gloria es una película triste. La mejor escena es la escena de las mujeres que ponen las sábanas al clareo. Las mujeres están muy bien tratadas en las películas del director manchego. El protagonista, en cambio, no queda muy bien. Es un hombre derrotado por sus dolores. No puede con el dolor de espalda. Salvador Mallo te da pena y también te causa rechazo. Podrías ser tú mismo porque todos tenemos algo de Salvador Mallo si abrimos la ventana de los recuerdos, cosa que hace este director de cine decrépito, que recuerda más que vive.
Nos habla de su infancia rodeado de mujeres. Ahí aparecen Penélope Cruz y Rosalía cantando mientras lavan y tienden la ropa. Vemos al niños Salvador Mallo. Pasan las escenas y ya lo vemos crecer, marchar de Paterna, enamorarse, decepcionarse cuando el amor se acaba. Aparece su pasión por el cine, sus éxitos, vienen los fracasos, el declive... Un drama.
Pero os recomiendo la película. Las películas de Pedro Almodóvar siempre son recomendables. Si no te gustan unas escenas te gustan otras. Tienen siempre su sello inconfundible. Dolor y gloria es la vida misma contada por Pedro Almodóvar desde un alter ego que se llama Salvador Mallo.
Amores y desamores. El amante que se casa y tiene hijos. La madre que lo acusa de no haber sido un buen hijo. Es esa escena con Julieta Serrano en el papel de madre la que más me impactó. Es muy fuerte que tu madre te diga que no has sido un buen hijo. Salvador ni siquiera tiene tiempo para ser mejor hijo. La madre muere en un hospital. Es la vida moderna. Su madre quería morir en el campo y acaba sus días en el hospital. Como la mayoría.
Os recomiendo la película. Es una película llena de tristezas. Tiene mucho dolor y poca gloria. Pero la gloria que tiene merece la pena ser vista. Os repito que me quedo con la escena en la que las mujeres cantan y lavan y tienden. ¡Qué felices fuimos con poco!
Es una película de los hermanos Dardenne premiada en Cannes. Nada nuevo bajo el sol. A los hermanos Dardenne siempre les premian sus películas en Cannes. Se ve que los aprecian mucho por allí
El joven Ahmed es una película como la vida misma: realista, inquietante. Vas viendo como este joven que vive en Bélgica con todas las comodidades de la vida moderna va perdiendo el norte pese a los esfuerzos de su familia por alejarlo de las malas influencias de un imán con unas ideas un tanto terroristas. Los imanes lo fastidian mucho con sus creencias salvajes. Lo llevan a que intente cargarse a su propia profesora porque cree que atenta contra el Islam. Casi nada.
La película es muy recomendable. Yo la fui a ver con unas amigas y, cuando empezó, pensé que no me iba a enganchar mucho, pero, según iba avanzando, no podía apartar la mirada de la pantalla. Tiene partes sorprendentes. El joven Ahmed es una buena película.
El reparto no cuenta con nombres conocidos. Idir Ben Addi, Olivier Bonnaud, Myriem Akheddiou, Victoria Bluck, Claire Bodson, Othmane Moumen son los actores que protagonizan la película. El joven que interpreta al niño está muy bien. Interpreta a la perfección el sentimiento de culpa del niño por haber intentado matar a su profesora. Como bien le dice la madre en una escena, era mejor que siguiera jugando a la playstation y que tuviera su habitación forrada con posters de cantantes famosos.
La película no te deja indiferente. Ves que el niño ha sido criado en un hogar lleno de amor, en un hogar formado por una madre belga y un padre árabe. ¿Por qué no está integrado el chaval? Es un lobo solitario que puede hacer un disparate. Eso te hace pensar. Pura tristeza. No es una película para personas depresivas. Pero merece la pena ir a verla. Yo os la recomiendo por lo bien realizada que está.
La trama es la misma que la de la novela: un estafador encuentra en una web de contactos una mujer rica. Pretende estafarla. Pero, como era previsible, se enamora de la señora millonaria y sus planes se tuercen. El amor nos vuelve buenas personas.
Hay muchos flashback. El pasado de los dos protagonistas se hace casi más presente que el presente. Esto le resta ritmo a la película. Te cansas de tanto pasado. Ni siquiera el buen hacer de dos buenos actores en los papeles protagonistas te hacen tener ganas de volver al cine para volver a ver la película. Helen Mirren es la mejor: borda su papel.
¿Os la recomiendo? Pues sí. Una película regular con buenos actores merece la pena ser vista. El reparto de La gran mentira no tiene desperdicio. Helen Mirren, Ian McKellen, Russell Tovey, Jim Carter, Mark Lewis Jones, Jóhannes Haukur Jóhannesson, Phil Dunster, Laurie Davidson, Michael Culkin, Aleksandar Jovanovic, Athena Strates, Bessie Carter, Celine Buckens, Sonia Goswami, Ruth Horrocks, Nell Williams, Stefan Kalipha, Dino Kelly, Jag Patel, Lily Dodsworth-Evans, Stella Stocker, Julian Ferro son los actores que la protagonizan.
La gran mentira no empieza mal. Tiene una primera parte interesante. Es en la segunda parte cuando hace aguas. Se vuelve ñoña. Roy Courtnay (Ian McKellen) es un estafador profesional perfecto cuando ves las primeras escenas de la película. Te enamora el personaje. La viuda Betty McLeish es la víctima perfecta. Si el estafador no se enamorara de una manera tan cursi de la señora la película estaría mucho mejor.